El lado oscuro...

Todos poseemos en nuestro interior un lado oscuro, con sentimientos y opiniones que nos gustaría hacer desaparecer, pero siempre nos persigue como una sombra y a veces nos supera y domina convirtiéndonos en monstruos que hacen cosas de las cuales nos arrepentimos, ya que en ocasiones dañamos a las personas que más queremos.
Este yo oscuro, es caprichoso e incontrolable, pues no tiene miedo a nada ni a nadie, por lo que tampoco tiene preocupaciones, por ello debemos intentar controlarlo y nunca ignorarlo, pues al final acaba llenandose de ira y reventando, y es así cuando nos lleva al punto de perder la cabeza y de hacer las mayores locuras.